Orwell en la Telepantalla

Él hizo "un homenaje a Cataluña", hoy yo rindo homenaje a su 1984. Todos conocemos, lamentablemente, el patético programa conocido como Gran Hermano, pues bien es de este libro en cuestión del que se extrajo la idea, lamentablemente se extrajo una dosis mínima e insuficiente porque desgraciadamente el programa tiene más aspectos dantescos que orwelianos. Olvidemos el sainete televisivo y centrémonos en la novela, aunque bien podría denominarse ensayo, porque las ideas que alberga son bastante profundas. Orwell por su controvertida biografía sabía lo que se traía entre manos y lo plasmó de una forma sensacional, en ciertos aspectos, desde mi punto de vista, el libro parece que no avanza y puede resultar un tanto árido, no tanto etilísticamente pero sí en el ámbito circunstancial de la obra. Con todo lo anterior, nos presentamos ante una de las obras monumentales del siglo XX, una auténtica crítica a los regímenes autoritarios, tanto al nacional-socialismo, como al sistema comunista(basado en la época Stalinista, como bien hace referencia aludiendo a las purgas cometidas en dicho mandato).

Orwell hace un profundo estudio del poder, y de cómo actúan las personas, bajo la contínua observación a través de la Telepantalla, describe perfectamente el dolor del indivíduo y cómo puede llegar a cambiar la mente humana. Es una verdadera maravilla la última de las tres partes en que se divide el libro, manteniendo un éstilo sobrio y poco ornamentado pero a la vez llevando el realismo hasta la perfección. Es también digno de mencionar la clarividencia de la falta de confianza en la actualidad y por supuesto la alabanza que hace de la palabra y de la importancia que ésta tiene en nuestros razonamientos.

Poco más cabe decir, una obra adelantada a su tiempo, pero con gandes retales de realismo y una prosa poco brillante pero muy eficiente.

"La Humanidad sólo podía escoger entre la libertad y la felicidad y para la gran masa de la Humanidad era preferible la felicidad" G. Orwell, 1984

A partir de leerlo espero que tengais más cuidado con la policía del pensamiento, y es que el Gran Hermano os vigila.

Firmado: Samsoryum